El mundo del anime nos ha dado cientos y cientos de historias donde adolescentes luchan por los más variopintos sueños: desde cosas sencillas como tener una vida tranquila, a convertirse en cocineros de primera línea, panaderos de nivel mundial o ser novelistas eróticos.
Uno de los animes estrenados el pasado enero, Koisuru asteroid, nos presentaba a una adolescente que quería cumplir una promesa muy especial: descubrir junto a una antigua amiga un asteroide al que ponerle nombre. Este sueño que parece algo tan poco común, algo que tan raro sería encontrar en el mundo real, ha resultado tener su propio reflejo en unas chicas de la India.
Como informan desde Reuters, dos adolescentes de 14 años del instituto de educación espacial de la India han descubierto un asteroide revisando imágenes captadas por el telescopio de la Universidad de Hawaii. El asteroide se encuentra actualmente cerca de Marte, y se espera que su órbita se cruce con la de la Tierra en nada más y nada menos que un millón de años.
El asteroide de momento se llama HLV2514, y solo se le pondrá nombre oficialmente cuando la NASA confirme que todo es correcto, pero una de las dos chicas, Vaidehi Vekariya, hacía unas declaraciones que sin duda nos recuerdan a Mira Kohinata, protagonista de Koisuru asteroid:
«Estoy deseando que llegue el día… en el que por fin podamos poner nombre al asteroide«.
¡Es Kohinata en la vida real! Aunque en otro país. Y no solo las declaraciones nos ayudan a identificar a esta prometedora joven con nuestra feliz protagonista de Koisuru asteroid, y es que como ella hace en el anime, sueña a lo grande y asegura que quiere convertirse en astronauta cuando sea un poco más mayor.
Radhika Lakhani, su compañera en el descubrimiento, es tan seria como Ao Manaka, la amiga y compañera de Kohinata, y es que decía: «No tengo ni TV en casa, así puedo concentrarme en mis estudios«.
Desde aquí deseamos lo mejor a ambas chicas, quienes han demostrado tener un gran interés en el espacio y en formarse para su futuro, y les agradecemos también que nos demuestren de que los sueños más descabellados pueden hacerse tan reales como vemos en muchos animes.
